Como bien he puesto en el título, este es un post dedicado a mi señora madre: la mujer que me llevó en su útero durante 9 meses y que aguantó los dos últimos en el más completo y aburrido reposo, porque la placenta que me daba todo lo necesario para crecer y desarrollarme estaba mal insertada y el riesgo de desprendimiento (y por tanto de aborto y demas complicaciones obstétricas) era muy alto. Madre mía, que cerquita estuve de no nacer...

En estas fechas tan duras para ella, no puedo sino hacerle un pequeño homenaje desde aquí y dar a conocer al mundo mundial lo grande que es. Con que haya sacado tan sólo un tercio de su fuerza y entereza, puedo estar tranquila de que no tendré problemas para afrontar cualquier revés que la vida me quiera dar y siempre conseguiré salir a flote.

Pero si existe una cosa en la que mi madre es especialista y de la que yo estoy especialmente orgullosa de haber heredado, es, sin duda, esa capacidad ilimitada para generar muletillas y dichos estúpidos. Un talento que, por otra parte, también posee mi tía Geni,(que es Jennifer en inglés, cosa que yo no sabía y que me enteré el viernes pasado de fiesta) y que fue heredado de su padre (véase, mi abuelo); y que yo espero poder transmitir a mi propia descendencia como parte de algún tipo de ancestral tradición familiar.

Muchas de ellas tienen un origen incierto, mientras que otras no son más que dichos populares venidos a menos o simplemente chistes familiares que se han perpetuado en el tiempo. Más de una vez me ha pasado que yo, ingenua de mi, he soltado alguno pensando que eran chascarrilllos de dominio público y la gente se me ha quedado mirando como si fuera gilipollas porque no lo han escuchado en su vida.

Yo las clasifico en dos categorias: las "resorte", que te suelta automáticamente a raiz de que alguien diga determinadas palabras o frases; y las "bytheface" , que mayormente no tienen ni pies ni cabeza y que te dice por la cara sin que exista desencadenante ni motivo aparente.

Aqui os dejo algunas de mis favoritas:

- Ante un "Mamá, me aburro", ella contestará irremediablemente: "Pues pipí caballo." Y si sigues insistiendo, te soltará un "Pues date con una piedra en la espinilla."

- La respuesta natural a un "¿A dónde vas?" es: "A contar los frailes." Existe una variante originaria de mi abuelo en la que uno va "Al Zapillo a por arena".

- Si se le pregunta en que está pensando, siempre es "En los huevos de Pascua."

- Y ante la pregunta de qué le han regalado, la respuesta es "Un tilín-tilín pal pelo y unas medias colorás."

- Si escucha el nombre de Abelardo, salta con el mítico "Abelardo, pélame un chumbo", por lo que hace unos años era realmente difícil ver un partido del Barça con tranquilidad.

- Momento presentaciones: todos los apellidos terminan en "Rodríguez Prieto Gutiérrez del Parapeto" y si le das la mano a alguien hay que saludar como "Un amigo, Paco Villalta", que no sé quien es pero le deben pitar los oidos con frecuencia.

- Mi madre no te manda a hacer puñetas, te manda a "hacer gárgaras con púas de gramófono", que es como más elegante y snob.

- "Mamá, no quiero más".
- "Pues cómete las patatas" (independientemente de que la comida de la cual no querías más fuese unas lentejas, un bocata de salchichón o arroz con leche).

- "Y le dice, Juan que te vengas en la carta llevas la maleta": ésta, que es mi favorita, forma parte del apartado "Frases de Antonia Barrilado", que era una señora que trabajaba de limpiadora el la Fonda de mi abuela y a la que parece ser que le faltaban un par de hervores. Según cuentan mi madre y mis tías, la buena mujer la soltó en mitad de un velatorio y la gente tuvo que salirse sin poder aguantarse la risa. Alguien le preguntó por la salud de su madre, y a ella no se le ocurrió nada mejor que contestarle algo así como: "Pues ya ves, está cagándose viva... está para meterla en una jaula. Y le dice, Juan que te vengas en la carta llevas la maleta". Sobra decir que mi abuela la trincó de la oreja ipso facto y la mandó a fregar las escaleras...

- Más de la señora Antonia: "Parece que vaa a llover, el cielo se está nublaando" cuando hace ya un rato largo que está cayendo una manta de agua.

- "No me corra el de la gorra. A usted le digo el del abrigo"... ésta pertenece a la categoria de "bytheface". Me encanta.

- Si escucha a alguien decir "¡Señora!" contesta de forma automática con un "este ojo me llora".

- Si llevas mal la hora es porque "Llevas el reloj por la esquina del muelle". Por lo que sé, éste es un dicho típico de Almería, en relación a un reloj que antiguamente (años 40-50 o así) existía haciendo esquina en la zona del puerto.

- Y para terminar, dos muletillas que también creo saber de donde vienen: El "¿Qué hora es? ¡La hora ciento tres!", era de un sketch del trio catalán de humor "La Trinca", de quienes mi padre era ferviente seguidor (en mi casa aún sigue coleando alguna estrofa del Quesquesé se merdé); o el "Ostrás Pedrín" como exclamación de asombro por excelencia, que era la frasecilla que siempre soltaba el protagonista un cómic de los años 40 llamado Roberto Alcázar y Pedrín.

Actualización: lo de "La hora ciento tres" era la cortinilla de un anuncio. No se de donde me he sacado yo que era de La Trinca...